Alfama

Alfama

miércoles, 30 de marzo de 2011

De Chernobyl a Fukushima


De repente un haz de luz cruzó un destello que confundió a cientos de miles de millones de partículas vivas que descansaban en silencio tras una jornada de trabajo. Los ojos... esos ojos cansados de tanto luchar se salían de sus cuencas, las mujeres embarazadas tenia niños prematuros y las criaturas del bosque se convirtieron en fósiles vivientes petrificados por la catástrofe...

Nadie sabia nada, solo el silencio llego hasta nuestros oidos sordos de ceguera.

El tiempo cambia inexplicablemente, miles de japones pasean por la calle mayor de Madrid. A una niña con uniforme se le cae un cuaderno al suelo y sigue su camino hasta casa sin saber que al otro lado del mundo una niña igual que ella murió contaminada por la radiación nuclear de Fukushima.

En menos de 25 años dos catástrofes nucleares... pero dicen que el tiempo lo cura todo solo que esta vez necesitaremos 24.000 años para enmendar esta catástrofe.