Alfama

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martes, 4 de mayo de 2010

REFLEXIÓN DESPUÉS DE UNA KATARSIS

O:¿Por quién me conoces?

K: Por un bribón, un pillo, un tragasobras, un vil, orgulloso, superficial, pedigüeño, un innoble, un tres trajes, un cien libras, un follón sucio con medias de estambre, un hombre de hígado color de lila, un cobarde, que si le apaleáis os perseguirá por la justicia, un hijo de puta, empañaespejos, archioficioso, ganapán afectado; uno que sólo tiene el cofre que heredó; uno de esos que aspiran a ser alcahuetes a fuer de servilones, y no son más que una mezcla de malandrín, mendigo, cobarde, pándaro e hijo y heredero de una perra mestiza; un canalla al que daré de palos hasta que oiga el clamor de sus bramidos, si niegas la menor sílaba de los títulos que te he dado.

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