Alfama

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miércoles, 14 de julio de 2010

UN PANTANO DE CHICLES

El sonido del aire acondicionado, el motor de los coches de la calle mayor, el acento del desconcierto anticipado y mil palabras para disfrazar una mirada no son suficientes para justificar un deseo oculto. Estoy expuesta a cualquier tipo de tortura envuelta en papel de regalo, pero ni tus cintas doradas, ni tus targetas de felicitación envenenadas te servirán en este caso... El color rojo es nuestro denominador común, Marte es mi celador, no tienes la creatividad suficiente para pasar, aquí hace demasiado calor para ti... es la diferencia entre el talentoso y el empollado, aunque eres bastante hortera, pero no tienes la genialidad del absurdo ni construcciones sintácticas sutiles como para ser brillante...eso si, eres bastante correcta, técnicamente claro. Los grandes siempre despuntan por su sentido del humor pero no hay seminarios para este tipo de arte.

Hoy los gorriones parecen pelotas de tenis y el asfalto un pantano de chicles pues la gente sensata prefiere los pasos de peatones para poder llegar a la otra cera.

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